jueves, 22 de febrero de 2007

+ House

Efectivamente, y tal y como me maliciaba, esta tercera temporada están estirando los guiones hasta límites casi absurdos. El capítulo del martes (el título, eso sí, era de antología " El hijo del tío en coma") forzó el argumento hasta el límite con la instigación al suicidio del padre. Recubierto, eso sí, de unas ciertas dosis de historia personal de House, con su aventurita por el Japón. Lo mismo que el tema del madero: están forzando un desenlace que no creo que sea del agrado de los seguidores de la serie. Lo están complicando, y están llevando la atención fuera de lo que estaba calando, que es la relación de House con su gente. Algo parecido sucedió cuando se metió por medio a su ex mujer: al principio, introdujo elementos novedosos que funcionaron, pero cuando se le dió un papel y permanencia entre los personajes, se jodió el invento, así que hubo que prescindir de ella. Pues algo parecido debería pasar con el madero loco: ya se ha tensado un poco el tema, se ha puesto de manifiesto la relación real de House con su gente, y ahora toca desaparecer. Que los árboles no nos impidan la visión del bosque...

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