Impresionante. Ese es el calificativo que se merece el conciertazo que se marcó REM en Murcia. Qué pocas oportunidades tenemos de ver grandes grupos en provincias, y qué poco lo aprovechamos, porque no es de recibo que no hubiera un llenazo de los que hacen época para ver a los de Athens. Quizás los precios de las entradas... ellos se lo pierden.
Un grupo de culto, leyenda de la música del siglo XX, parte de la historia... lo que quieras decir le vale. Pues esos señores estuvieron ¡¡ dos horas y diez minutos !! de tremendo concierto. Otros con infinitamente menos pedigree, qué digo, pedorros triunfitos soplagaitas tocan una hora y media, y gracias, incluidos los bises. Pues no, estos se curraron hasta el último euro que le pagaron. Stipe domina como nadie el ritmo del espectáculo. Pocas contorsiones, pero en el momento justo para levantar el concierto hasta hacerlo inolvidable. Quizás Buick estuvo demasiado frío, como suele ser habitual en él, aunque me pareció más incluso que de costumbre. Simpática la interpretación de Mills de "Rockville", haciéndole Stipe los coros. Y un acústico que no acerté a identificar, curioso, pero que estuvo a punto de tumbar el concierto.
Hubo tiempo para todo. Sobre todo, porque no abusaron de la promoción del último disco (no entendí muy bien por qué no tocaron la muy aprovechable "Accelerate", que, además, da nombre al disco), y porque no tocaron ni una (creo) del abominable "Around the sun", que tanta paz lleve como deja. La versión de "Electrolite" me puso los pelos de punta. Los bises, con "Losing...", "It's the end of the world", "Orange crush", y el inevitable "Man on the moon", de fábula. Su sonido es, otra vez, contundente. El batería que ha sustituido a Berry (Rieflin) ha dado otro aire, ha recuperado lo que recordábamos, pero dábamos por perdido tras las últimas y poco afortunadas experiencias.
Subo alguna foto del evento. Se disculpará la baja calidad de las fotos, ¿no?
Un grupo de culto, leyenda de la música del siglo XX, parte de la historia... lo que quieras decir le vale. Pues esos señores estuvieron ¡¡ dos horas y diez minutos !! de tremendo concierto. Otros con infinitamente menos pedigree, qué digo, pedorros triunfitos soplagaitas tocan una hora y media, y gracias, incluidos los bises. Pues no, estos se curraron hasta el último euro que le pagaron. Stipe domina como nadie el ritmo del espectáculo. Pocas contorsiones, pero en el momento justo para levantar el concierto hasta hacerlo inolvidable. Quizás Buick estuvo demasiado frío, como suele ser habitual en él, aunque me pareció más incluso que de costumbre. Simpática la interpretación de Mills de "Rockville", haciéndole Stipe los coros. Y un acústico que no acerté a identificar, curioso, pero que estuvo a punto de tumbar el concierto.
Hubo tiempo para todo. Sobre todo, porque no abusaron de la promoción del último disco (no entendí muy bien por qué no tocaron la muy aprovechable "Accelerate", que, además, da nombre al disco), y porque no tocaron ni una (creo) del abominable "Around the sun", que tanta paz lleve como deja. La versión de "Electrolite" me puso los pelos de punta. Los bises, con "Losing...", "It's the end of the world", "Orange crush", y el inevitable "Man on the moon", de fábula. Su sonido es, otra vez, contundente. El batería que ha sustituido a Berry (Rieflin) ha dado otro aire, ha recuperado lo que recordábamos, pero dábamos por perdido tras las últimas y poco afortunadas experiencias.
Subo alguna foto del evento. Se disculpará la baja calidad de las fotos, ¿no?
