viernes, 7 de octubre de 2011

Fitch baja dos escalones la nota de solvencia de España

Problema, y de los gordos. Ahora ya no nos cree nadie, definitivamente. También era mucho suponer que aún mantuviéramos alguna credibilidad, pero como la esperanza es lo último que se pierde... sin contar el rating, claro. Adicionalmente, con perspectiva negativa, lo que anticipa nuevas bajadas. A ver cuánto tarda el PSOE en salir diciendo que la culpa es del déficit de las CCAA. Que no ayudan, está claro. Que el brutal incumplimiento por parte del Gobierno (del que formaba parte Rubalcaba) del espíritu y la letra del Sistema de Financiación Autonómica contribuye a acelerar el proceso de deterioro fiscal autonómico, también. Que esta larga agonía antes de las elecciones no hay Dios que la entienda, es de cajón. Que se está perdiendo un tiempo precioso, se da por descontado. Y ahora, Fitch lo pone negro sobre blanco.

Problema, y de los gordos, como decía, porque ahora viene la cascada de bajadas de rating: Comunidades Autónomas, Ayuntamientos, Bancos, Cajas, grandes empresas... toda la marca "España" al garete. Si no hay prácticamente financiación, y la que hay es cada día más cara, ¿quién va a apostar por un país con un acelerado ritmo de deterioro fiscal?. Si no hay crecimiento, por mucho que se empeñe Salgado, en un ejercicio vano de voluntarismo, ¿qué se puede esperar de un sistema fiscal absolutamente inelástico, ineficiente e incapaz?.

Mariano, qué cojones tienes por enfrentar este toro...