dia 3

Por fin dejamos (provisionalmente), Belgica. Por el amor, como pueden entenderse  en esa ciudad?. De locos, ni una sola señal coherente. Llegamos finalmente a Utrech, que tenia poco que ver, pero como notamos el cambio. De entrada, la gente es mucho mas guapa que en Belgica. Los precios, parecidos a los de España, o mas baratos incluso. La gran diferencia, el agua. Por todas partes, rios, canales, y lluvia, mucha lluvia.

Llegamos, con cierto suspense, al garito de Harderwijk. Mejor de lo esperado, pero nada de intimidad. Aunque eso estaba previsto. Pedazo de cena en el Tennessee, vaya ribs!!!. Restaurante de cabecera durante la estancia, imagino...